sábado, 29 de octubre de 2016

LA PERSUASORA

Por Josué Cabrera

Hoy en día, para lograr cerrar un negocio es necesario saber el arte de la persuasión, en donde logres enganchar al inversionista a través de sus emociones, dejando unos pocos minutos para hablar netamente del negocio a realizar.

Este es el caso de una persuasora, agente de ventas turísticas, con la cual tuve un encuentro con previa cita para escuchar sobre su propuesta.

Ni bien llegamos un chico nos recibió en el restaurante en donde nos habian citado, otras mesas estaban con sus respectivos asesores, unos preocupados por conocer sobre sus gustos de viaje, niveles de ingresos, etc., con caras preocupadas de no conseguir su meta.

La agente vendedora, "la persuasora", llegó hacia nuestra mesa, al aprovechar la ocasión de que nos encontrábamos papá y yo, hizo sus primer comentario tan obvio "padre e hijo, ¿verdad?", nosotros sonriendo acentimos con la cabeza, seguido a ese comentario volvió a engancharnos "los rasgos de parentezco son tan notorios" y empezó la conversación, mi papá ya estaba enganchado.

Tocaron temas de su trabajo, se turnaba para conversar del suyo, no desaprovechó su momento para mencionar su nacionalidad, un enganche adicional, que dio resultado, en el trabajo mi papá tiene que trabajar con personas  de la misma nacionalidad, y la conversación fluyó aun más.

Poco a poco iba adentrandose en lo que ofertaba e indirectamente comenzó a hablar de viajes, y de su inglés perfecto, otro enganche más, mi papá hizo que ella conversara conmigo en inglés, lo cuál utilizó para hacer ver la visión del perfeccionamiento en ese idioma en el exterior, y al mismo tiempo aventurarme.

Desde este punto su enganche se basa en conocer, viajar, experimentar la vida, transmitiendo ese deseo a través de las experiencias vividas con su esposo e hijo, podría decirse el drama aplicado, utilizaba de manera oportuna  sus gestos, manos,  y tonalidad de su voz, mostrando fotos cada vez que podía.

Era indiscutible, mi papá estaba enganchado, fue una buena manera de hacerlo, sin embargo a mi aun no lo lograba y discretamente la analizaba. La mejor estrategia fue utilizar su debilidad, yo, para "ayudarme" a conocer el mundo, controlando la situación y dominio sobre él, sin duda alguna el arte de persuadir requiere paciencia-en este caso treinta minutos de charla amistosa continua.

Despues de haber estrechado lazos, empieza la introducción al negocio, mostrando la parte más sencilla de la propuesta, esquivando sutil y habilidosamente las preguntas complicadas, repitiendo constantemente beneficios y utilizando los datos anteriores que logró obtener para utilizarlos a su favor.

Pese a toda negativa, mirando aspectos económicos entre mi papá y yo, logró llegar a un punto que no nos pareció ni malo ni bueno, un punto óptimo para que lograra cumplir con el objetivo de cerrar el trato. Nos enganchó y nos dejó sin salida. El trato fue heco, aparentemente.

Finalmente, no se concretó, de la nada la persuasora cometió un error en el cálculo financiero y dejó que nos diéramos cuenta sin querer, cancelando la negociación, aunque en la mesa de alado festejaban el cierre del trato con una pizza.

Como lección queda que el poder de la persuasión nace desde la parte sentimental, en donde se persuade al individuo para entablar una amistad esporánea por un buen rato, para lograr relacionarlo con la negociación, claro, en el transcurso de la negociación es necesario ser hábil en ocultar las partes negativas. Al final, el persuador sale victorioso, en otros casos, no.

Frase del momento

"Si yo fuera excelente, usted me hubiera comprado."

-La persuadora

miércoles, 19 de octubre de 2016

TALENTO HUMANO: AFRONTANDO ÉPOCAS DE INCERTIDUMBRE

Por Josue Cabrera

Es muy común hoy en día escuchar la era de crisis económica global que se atraviesa, algo que ocurre con más frecuencia que hace un siglo atrás y que afecta a miles de millones de personas, especialmente organizaciones.

Cuando se atraviesan épocas de caos en un determinado mercado, las empresas se ven tentadas a reducir costos en diferentes aspectos: personal, calidad del producto, marketing, investigación y desarrollo, entre otros.

Sin embargo, Kotler y Caslione (2010) argumentan que en épocas de incerridumbre es preciso llevar un adecuado control y no buscar reducir costos de manera aleatoria, mas bien continuar mejorando en cada una de las áreas para lograr sobresalir y conseguir ser una de las empresas líderes al comenzar épocas más estables y en este caso nos enfocaremos en el talento humano.

Dentro del área de Talento Humano es muy notable que existan altas tasas de rotación debido a la mala situación que puede generar épocas inestables, lo que conlleva a la insatisfacción del empleado que ocasiona:

• Falta de interés en el trabajo.
• Inconformidad con su rol.
• Frustración económica.
• Temor de perder su puesto.

Cada uno de estos puntos genera una fuga de talento en una organización, donde muchos de sus empleados estarán en la búsqueda de nuevas oportunidades laborales que les permitan ejercer una actividad de su agrado, que puedan ser incluido, que le brinden la oportunidad de incrementar sus ingresos económicos, y sobre todo, que le hagan sentir seguro dentro de la organización.

David Garvin (2014) escribió un caso práctico denomindado "Can a strong culture be too strong?" en la Harvard Business Review, en donde se menciona que una cultura organizacional lo suficientemente fuerte puede hacer que su talento humano sea mucho mas productivo y creativo para una empresa, un factor que es de gran ayuda en épocas de incertidumbre.

Para que una cultura organizacional sea fuerte es necesario analizar el talento que posee en la actualidad la organización, identificar si los puestos en los que se encuentran van de acuerdo a sus gustos, realizar la respectiva reubicación, generar un vinculo de confianza entre los empleados y sus superiores para posteriormente fomentar el flow.

El término flow -que en español sería flujo o corriente- lo menciona Steven Kotler (2014) en su artículo "create a work environment that fosters flow" de la Harvard Business Review. Este término hace incapié al "estado óptimo de consciencia donde mejor nos sentimos y rendimos de la mejor manera", es decir, el trabajo se convierte en algo entretenido y deja de ser repetitivo y aburrrido.

Para generar este estado dentro de la cultura organizacional dentro de una empresa, los CEOs deben estar dispuestos a ser comprensibles con sus empleados, estar pendientes de sus inquietudes y primordialmente, tolerar errores, puesto que para generar un estado de Flow, al empleado se le incrementará dentro de sus actividades un ligero porcentaje de dificultad que haga salir de lo repetitivo a algo diferente al empleado. Muchas veces las personas pueden preferir quedarse en un lugar de trabajo en donde se siente a gusto que buscar uno diferente en donde pueda recibir un mayor ingreso económico, que muy dificilmente suele ocurrir en tiempos difíciles.

Al final del día, cada uno de las personas que se encuentran trabajando en un estado de flow dentro de la empresa no se habrán dado cuenta que la hora de salida ha llegado, generando en ellos una necesidad de urgencia de que venga el siguiente día para seguir con su trabajo, siendo este un factor importante a tener en cuenta en épocas de incertidumbre.